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La falta de actividad física regular incrementa el riesgo de padecer sobrepeso u obesidad, además de ser la causa de un gran número de enfermedades crónicas. De hecho, el ejercicio es esencial para disfrutar de una buena salud. De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), ayuda a mantener un peso saludable, reduce el riesgo de sufrir algunas enfermedades no transmisibles como las cardiovasculares, diabetes tipo 2 y síndrome metabólico y algunos tipos de cánceres. En este sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda realizar un mínimo de 150 minutos de actividad física moderada a la semana o 75 en caso de que esta sea vigorosa.
¿Cuál es el tipo de ejercicio más beneficioso para la salud?
Conviene realizar tanto ejercicio aeróbico (caminar, nadar, correr, montar en bicicleta) como anaeróbico (esfuerzos breves basados en la fuerza como levantamiento de pesas o sentadillas). Sin embargo, algunos estudios han demostrado que el ejercicio de fuerza, el cual se centra en tonificar y fortalecer músculos y articulaciones, tiene más beneficios para la salud que caminar. No se trata de decantarse por un tipo de ejercicio u otro, pero sí que se deben añadir los de fuerza a los de resistencia.
En este sentido, una revisión de 16 estudios observacionales previos publicada en The British Journal of Sport Medicineconcluye que ente 30 y 60 minutos semanales de actividades de fortalecimiento muscular se asocian con un 10-20% menos de riesgo de muerte por enfermedades no transmisibles y, en particular, las cardiovasculares, diabetes y cáncer.
Asimismo, un trabajo realizado por investigadores de la Universidad de St. George analizó, en 4.086 adultos estadounidenses, los factores claves de riesgo relacionados con el padecimiento de un infarto, como pueden ser la presión arterial alta, el sobrepeso, la diabetes o los niveles elevados de colesterol, en función de la actividad física (estática o dinámica) que practicaban.
Los investigadores descubrieron que participar en sendos ejercicios se relacionaba directamente con la reducción de los factores de riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular entre un 30 y un 70%, pero bajaron más en el caso de los que llevaron a cabo entrenamientos estáticos y en los más jóvenes.
La importancia de combinar ejercicio aeróbico con anaeróbico
Tanto el ejercicio de fuerza como el aeróbico son muy beneficiosos para mantener un óptimo estado de salud. Sin embargo, según estas investigaciones los anaeróbicos demostraron ser más efectivos. Lo ideal, de acuerdo con la OMS, es complementar el ejercicio aeróbico con dos días de fortalecimiento de los músculos. De esta forma, lo más recomendado sería añadir sentadillas, fondos, dominadas o levantamiento de pesas a otros ejercicios como son caminar, ir en bicicleta o nadar.